John Winston Lennon, integrante del desaparecido grupo The Beatles, fue un artista que en los años sesenta se caracterizaba por causar controversia en el mundo. En 1966, cuando este músico formaba parte del desaparecido cuarteto, se inmortalizó su declaración: “The Beatles somos más populares que Jesucristo”, teniendo por consecuencia el rechazo de muchos admiradores y especialmente del Vaticano.
Un año después de lo ocurrido, Lennon conoce a la artista plástica Yoko Ono, quien sería su segunda esposa en 1969.
John Lennon se caracterizó por ser una persona que luchaba en favor de la paz. Y qué mejor manera de demostrarlo que con sus canciones. Yoko Ono fue para Lennon una persona que lo influyó en el pacifismo. Cuando él continuó con su carrera artística, esta vez como solista, escribió algunas canciones con un mensaje para el mundo a convocar a la paz.
“Imagine” es una canción en la que expresó su deseo de vivir en un mundo unido. Otra de sus canciones es “Give peace a chance” la cual se ha tomado como casi un himno a la paz; el video muestra a un grupo de pacifistas interpretando esta canción con John Lennon y Yoko Ono.
Una de sus canciones que nos ayuda a reflexionar es “Happy Christmas (war is over)”, en la que Lennon nos dice que todos debemos de vivir una feliz navidad siendo unidos y sin tener conflictos con la gente que está a nuestro alrededor.
Debido las canciones que escribió Lennon convocando a la paz, en especial porque en esa época se vivía la guerra de Vietnam, iniciada en 1964, el presidente de ese momento, Richard Nixon citó a la juventud de Estados Unidos a unirse para apoyar a Vietnam del sur. Dicha situación no era aprobada el ex beatle, así que hizo un llamado a la comunidad tratando de que ésta no apoyara la guerra y se uniera a protestas para reclamarle al gobierno sobre esta decisión.
La canción “Give peace a chance”, fue entonada por la gente que apoyaba este movimiento convocado por John Lennon y Yoko Ono.
Mark Chapman, era un fanático de The Beatles, que se caracterizó por ser un narcisista con trastornos mentales. Al separarse el cuarteto, Chapman siguió la trayectoria musical de Lennon como solista, pero al haber leído la novela El guardián en el centeno (The Catcher in the Rye), de J.D. Salinger, quiso modelar su vida al estilo del protagonista del libro Holden Caulfield. Debido a ello, Chapman dedujo que Lennon era una persona falsa, ya que el músico decía que debíamos de vivir sin posesiones, aún cuando él era millonario.
En la tarde del 8 de diciembre de 1980, Lennon y Ono salieron del edificio Dakota y el músico autografió una copia del Disco Dobule Fantasy que pertenecía a Mark David Chapman; posteriormente Lennon y Ono se fueron al estudio de grabación y el fanático se quedó en ese lugar. Alrededor de las 10:50 pm, cuando Lennon regresaba a su hogar, Chapman le disparó cuatro veces por la espalda. Una patrulla llevó a John y Yoko al hospital mientras que el asesino se quedó en la escena del crimen. Lennon fue llevado a la sala de emergencia del Hospital Roosevelt y fue declarado muerto a su llegada a las 11:07 pm.
Debido a que John Lennon tuvo problemas en Estados Unidos por hacer un llamado a la juventud a que no formaran parte de la guerra, se elaboraron algunas teorías acerca de un posible asesinato por encargo. Es decir, el asesino fue enviado por el gobierno de los EEUU para silenciar lo que la CIA y el FBI consideraban una amenaza para la Seguridad Nacional. El FBI fue obligado por una orden judicial en 1983 a desclasificar los documentos que tenía sobre John Lennon.